Carta Abierta a los Jefes de Estado y Gobierno de Iberoamérica Participantes en la VII Cumbre Iberoamericana
La Habana, 16 de Septiembre de 1997.
Excelencias:
José Martí dijo: "La América ha de promover todo lo que acerque a los pueblos y de abominar todo lo que los aparte. En esto, como en todos los problemas humanos, el porvenir es de la paz."
El umbral del tercer milenio ha convocado a los gobiernos de Iberoamérica a aunar voluntades en la consecución de la democracia, el estado de derecho, el pluralismo político, el respeto de los derechos fundamentales de la persona humana y la probidad, como pilares de un proceso de desarrollo sostenido de nuestras sociedades.
El pueblo de Cuba está urgido de un programa de distensión que lo libere de los obstáculos y las ataduras que lo invalidan para unirse a estos propósitos comunes.
Por estas razones, solicitamos en nombre de la justicia y la solidaridad americanas, a los presidentes de Iberoamérica que:
- Propongan al gobierno de los Estados Unidos que dicte una moratoria total al embargo contra Cuba y a la ley Helms-Burton y, dé los pasos necesarios para iniciar un proceso de negociación del diferendo Cuba-EE.UU., con la participación de los gobiernos iberoamericanos como garantes.
- Propongan al gobierno de Cuba que en cuanto se inicie este proceso negociador con el de los Estados Unidos, dé pasos en la implementación de los acuerdos de Viña del Mar, priorizando la realización de una amnistía política, garantizando el pleno ejercicio de las libertades fundamentales de la persona humana, especialmente la libertad de expresión, asociación y todas aquellas que emanan de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
- Propongan al gobierno de Cuba que determine un plazo para la realización de un plebiscito, donde el pueblo cubano pueda decidir, libremente, el sistema de gobierno que prefiere, participando los gobiernos de Iberoamérica como garantes.
- Propongan a la Unión Europea su presencia como observadores de todo este proceso de renovación política.
- Que soliciten sus buenos oficios a Su Santidad Juan Pablo II en este programa de paz para Cuba.
Respetuosamente,
Rafael León Rodríguez
Coordinador General